Las
creencias son gratis, pero habitar en ellas puede salir muy caro, por tanto: ¿Estamos
haciendo lo mismo una y otra vez y aún así esperamos tener resultados
diferentes? ¿Nos aparecen una y otra vez los mismos problemas de autoestima? Si
generamos nuevos pensamientos, tenemos nuevas emociones, y con nuevas
emociones, generamos nuevas acciones y por tanto, nuevos resultados.
A veces
escuchamos que los porteros no progresan, pero en realidad, si que progresan, cuando
lo hacen sus creencias. Ahora nos preguntamos, ¿Qué es una creencia? Pues solo
aquello que un portero puede pensar que es posible o que no es posible.
Son ideas,
formas, convicciones, maneras de pensar, percepciones o maneras de ver las
cosas. Si queremos progresar como porteros, tenemos que abandonar algunas
creencias antiguas que pensábamos, y adoptar otras nuevas. El hecho es que
nuestras creencias y formas de pensar, determinan nuestra calidad como portero.
Si pensamos
en algún problema actual, probablemente es que tengamos creencias ilimitantes y
disfuncionales en esa posición. Todos los porteros podemos cambiar nuestras
creencias y pensamientos, y de esa manera cambiar nuestro nivel de mejoría.
Para cambiar
las creencias se requieren 3 condiciones:
-
- Que queramos
cambiar, ya que si no queremos cambiar, no hay nada que hacer.
-
- Saber cómo
cambiar. Si no sabemos cambiar, ¿Cómo lo hacemos?
-
- Permitirnos
el cambio.
Os dejo una
frase acorde con el contenido de la entrada.
“Siembre un
pensamiento, y recogerá un destino”
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