Todo ello
se puede desglosar, pero lo que nos interesa realmente es donde se sitúa el
portero y en qué zona. Normalmente y es obvio, el portero se sitúa en zona de
portería, pero eso que quiere decir que nuestro entreno durante 50 sesiones al
año, ¿se tiene que basar exclusivamente en zonas de portería? La respuesta es
no, porque al portero le supone quedarse metido siempre en la portería.
Al
portero le interesa saber la referencia de donde tiene el punto de penalti, la
línea del área pequeña, y debe ser inconscientemente la reacción. El portero que está trabajando siempre fuera de su entorno, pierde esas
referencias porque se desubica. Eso se produce no porque no tenga claro el
concepto, sino porque la referencia no la tiene clara.
El portero también
trabajará en situaciones de fuera de portería, por ejemplo fuera del área
situaciones frontales, que es el segundo porcentaje que más se da en los partidos, y además,
ocupando toda la zona del área de penalti.
Entonces, nuestro trabajo ¿se basará
solamente en situaciones donde el balón acaba dentro de este espacio? La
respuesta es no, porque va a participar en diferentes zonas a lo largo del
partido, y debe saber por ejemplo que si llega forzado, se puede resbalar y
salirse fuera del área, y tiene que saber cómo solucionar eso. Luego, en un partido, el portero sale y le pitan falta, pero ¿alguna vez hemos trabajado la
situación del portero que vaya al límite? Es una cosa que el portero debe conocer.
Para finalizar la entrada, os dejo una frase para la reflexión. Un saludo.
"Para correr, primero hay que aprender a caminar".
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