¿Conocemos que nos demanda principalmente la categoría donde trabajamos? Es una pregunta que nos debemos plantear, antes de diseñar una sesión, una semana de entrenamiento, o un mesociclo de competición.
¿Se trabajará el blocaje en un portero benjamin? ¿Se trabajará el blocaje en un portero cadete? Trabajaremos esa acción técnica específica defensiva de portería, en función de la importancia que tenga para esa categoría.
Teniendo en cuenta todos estos factores, conseguiremos que el portero que empieza en benjamines, alevines, infantiles, cadetes, juveniles y amateur, cuando lleguen a su momento de alto rendimiento, habrán trabajado en función de lo que le ha exigido cada categoría, y así lo habrán trabajado todo.
¿En qué volumen de
trabajo? En el adecuado para cada categoría, pero a lo largo de su proceso
evolutivo lo habremos trabajado todo. Lo importante es trabajar en el volumen,
contenidos y la cantidad que pide para cada categoría.
Entonces, si nosotros
sabemos que pide la competición, sabemos que planificar y como tenemos que
planificar. Pero claro, si llegamos a
entrenar y montamos una sesión perfecta, llegamos al día siguiente y montamos otra
sesión perfecta y al cabo de tres meses, seguimos montando una sesión perfecta pero no
tenemos en cuenta que contenido trabajamos en cada sesión en función de que es lo
ideal, al final de año ¿qué volumen de trabajo hemos hecho de un contenido y que
volumen de trabajo hemos hecho de otro contenido? Al final de año, tenemos que ver
qué es lo que hemos trabajado.
Felicitar al creador de este blog el señor David García Luque.
ResponderEliminarMuchas gracias compañero por tus palabras. Por comentarios como los tuyos, seguiré aprendiendo para poder aportar mi humilde opinión. Un saludo.
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